Obscuridad es lo único que hay ante los ojos cerrados, y un paraiso para aquellos que tienen la dicha de gozarla. Todos nacen con ella, imparable para aquellos que la desarrollan; mortal para los que la han perdido.
Temida por ser ilimitada, la sociedad ha intentado subyugarla para impedir que las personas vivan algo que es difícil de entender, se vuelve tan inmensa que puede llegarse al delirio de no poder identificar qué es verdad y qué es mentira. Mitos y leyendas. ¿Quién nos asegura que algo con lo que nos hacen soñar puede debatirse entre dichas vertientes? ¿Qué nos hace pensar que algo suficientemente maravilloso pueda ser mentira?, pues quizá sea verdad.
En la historia se ha hablado sobre la trascendencia de personajes y hechos que cambiaron el rumbo de la humanidad; ¡rayos! lo es también aquello que también no se ha dicho. Así como una mentira se vuelve verdad tras ser repetida en muchas ocasiones, una verdad puede morir si se suprime su intercambio, como dice GRRM con el personaje Tyrion Lannister: "Si le cortas la lengua a un hombre, no demuestras que estuviera mintiendo: demuestras que no quieres que el mundo oiga lo que pueda decir".
Podemos pasar una vida viviendo de lo que nos ofrecen las personas, o suponer que lo que nos ofrece nuestra mente alguna vez existió. Soy la intención de que cierres los ojos e imagines por ejemplo: Dragones. ¿Por qué decir que son falsos? Son tan citados en los libros que el mismo humano pudo haber eliminado todo rastro de su majestuosidad. O solo quizá, fue incapáz de coexistir en paz.
Tan parecido a cuando un pueblo es conquistado por uno superior; Dioses, creencias y templos son instalados sobre los que deben ser borrados, pues lo que se desea es que solo prevalezca lo que se cree es correcto. ¿Por qué decir que no existieron, cuando hay cuevas inmensas que el tiempo se ha encargado de inalterar, como guardando el respeto al lugar que alguna vez albergó libertad hecha fuego?
Tengo la certeza que los mundos que ahí nacen no son casualidad, son la representación de un mundo paralelo, o la intención del tiempo de mostrarnos todo aquello que nos perdimos mientras no no estábamos vivos.
Bites.